Madrugada sangrienta en Tepic, deja saldo de dos muertos

Gabriel Orozco M.

Tepic Nayarit 20/03/2011.- Corrió la sangre en la 2 de agosto de Tepic la madrugada del domingo. En las colonias Dos de Agosto y Díaz Ordaz, casi en las vías del ferrocarril;  un sujeto fue asesinado en la  llamada “cartolandia” y más tarde seria ubicada una dama en las inmediaciones de  la lechera San Marcos con el cuerpo cocido a balazos con armas de grueso calibre.

Personal de  La Procuraduría General de  Justicia, aseveró que después de las 00:00 del  domingo  vecinos de esas colonias reportaron que  se oyeron ráfagas de “cuernos de chivo” en la colonia Dos de Agosto, por lo que se trasladaron a esa zona y encontraron a una persona se encontraba lesionada por la calle Prieto Crispín entre Dos de Agosto y Colono Combativo, que luego seria identificada como Oscar Ibarra Bibriesca, de 31 años de edad, originario y vecino de esta ciudad, con domicilio en calle 20 de febrero número 10  de la colonia Dos de agosto, quien presentaba tres heridas de proyectil de arma de fugo  debajo de la tetilla derecha con orificio de salida en la espalda a la altura del pulmón, parte frontal de la pierna izquierda con orificio de salida y tobillo izquierdo.

Cerca de las 3 de la mañana,  fue encontrada una mujer atada de pies y manos, de aproximadamente 35 años, a la que luego se supo le llamaban “Elvia”, misma que tenía fuertes heridas ocasionadas por los proyecitiles. Peritos encontraron  casquillos percutidos del calibre 7.62×39 del famoso fusil AK-47. Tomó nota de los hechos el agente del Ministerio Público.

Sólo se sabe que arribaron  tres vehículos al domicilio de la calle 20 de febrero numero 20 de la colonia 2 de Agosto,  bajándose varios sujetos fuertemente armados con fusiles,  llevándose a la fuerza y privando de su libertad a una persona del sexo femenino quien los vecinos la conocían con el nombre de “Elvia” y que en la huida los sicarios  detonaron sus armas de fuego de manera irresponsable y unos de los proyectiles da al hoy varón occiso, cuyo pecado fue haber estado ingiriendo bebidas embriagantes en compañía de sus amigos. Una víctima más de la inseguridad.